sexta-feira, 20 de julho de 2012

Reviviendo un Charango

Durante 20 años hubo en casa de mis padres un charango decrépito que Alberto, un amigo, reconstruyó en su momento a partir de uno de esos ejemplares con caparazón de mulita auténtico, cuyos oscuros orígenes desconozco. Pero el destino le tenía reservada todavía una vida más (por lo menos) y así fue que me tocó repararlo. La tapa nueva es de Alerce y el puente es de Ébano, el resto fue mantenido como estaba.















Nenhum comentário:

Postar um comentário